" HIJAS DE LA NATIVIDAD DE MARIA", AIRE FRESCO PARA EL PERÚ. http://www.ishijasnatividadmaria.org/

Con sumo gozo les informamos de la presencia de un nuevo Instituto en el Perú: “ HIJAS DE LA NATIVIDAD DE MARIA”. 

Su directora general, María Pulleiro, nos envía una "carta de presentación" y un saludo cordial para todos los institutos desde Manchay. Les pongo su correo para lo que se ofrezca mpulleirooro@yahoo.es. Nuestra oración y la más fraternal bienvenida

"Estamos trabajando a pleno en el Cerro San Pablo.

Un abrazo con el saludo de cada una

                        Mª Elena, Leida y María 

PRESENTACIÓN DEL INSTITUTO SECULAR “ HIJAS DE LA NATIVIDAD DE MARIA”

El Instituto Secular “Hijas de la Natividad de María”, llegó a Lima Perú, el 12 de febrero de 2014, para apoyar la labor educativa y evangelizadora del Centro Educativo Parroquial  “San Pablo”, en Manchay., Pachacamac.

Somos un Instituto con una forma nueva y original de Vida Consagrada, que nació como un Don de Amor y Servicio al mundo.

Nuestro Fundador, D. Baltasar Pardal Vidal, sacerdote diocesano, como catequista y Director de las OMP, dedicó su vida a la evangelización, a la educación y a la promoción humana. Supo ver el mundo con ojos de “niño”, con ojos llenos de esperanza y de amor, así fue como fundó el Instituto Secular “Hijas de la Natividad de María”, con el fin  de que podamos ser Imagen viviente de Cristo y de nuestra Madre, María.

Recibió la Aprobación Pontificia en el año 1977 y se rige por unos Estatutos Aprobados por el Santo Padre.

Este Instituto admite dos estilos de vida. Están las que eligen vivir en pequeños grupos y también las que deciden vivir solas o con su propia familia. Todas vivimos el fruto de nuestra profesión, de forma tal que nuestro principal campo de apostolado se da en nuestro lugar de trabajo. Vivimos nuestra Consagración en el mundo y desde el mundo, pero sin ser del mundo.

Como laicas consagradas, vivimos nuestra Entrega a Cristo, comprometidas con su misma misión: “ser fermento en el mundo”, “puente entre la humanidad y Dios Padre”, “luz” que ilumine todas las realidades del mundo y de nuestro tiempo.

D. Baltasar trasmitió a sus Hijas el Carisma recibido del Espíritu Santo y la Espiritualidad que él mismo practicó: “La vivencia de la Infancia Espiritual al estilo del Evangelio; un amor tierno y delicado a la Eucaristía y a María, un profundo Espíritu Misionero, y opción preferencial por los niños, los pobres, y la promoción integral de la mujer”.

Deseamos que nuestra vida  y testimonio de mujeres consagradas en Manchay, ayude a vivir los valores del Evangelio y a descubrir el amor grande que nos tienen Jesús y María.