domingo, 1 de septiembre de 2013

EL PAN ESPIRITUAL NUESTRO DE CADA DÍA. LA ORACIÓN DEL MILITANTE

Descanso veraniego

Como otros años, el equipo de Oración del militante permanecerá durante los meses de julio y agosto descansando con motivo del periodo estival. Deseando un feliz verano, nos volvemos a ver en septiembre.

Un cordial saludo

30/6/2013, Domingo de la XIII semana de Tiempo Ordinario (Ciclo C)

Lectura del primer libro de los Reyes (19, 16b. 19-21)

En aquellos días, el Señor dijo a Elías: -«Unge profeta sucesor tuyo a Elíseo, hijo de Safat, de Prado Bailén. » Elías se marchó y encontró a Eliseo, hijo de Safat, arando con doce yuntas en fila, él con la última. Elías pasó a su lado y le echó encima el manto. Entonces Eliseo, dejando los bueyes, corrió tras Elías y le pidió: - «Déjame decir adiós a, mis padres; luego vuelvo y te sigo.» Elías le dijo: - «Ve y vuelve; ¿quién te lo impide?» Eliseo dio la vuelta, cogió la yunta de bueyes y los ofreció en sacrificio; hizo fuego con aperos, asó la carne y ofreció de comer a su gente; luego se levantó, marchó tras Ellas y se puso a su servicio.

Salmo responsorial (Sal 15, 1-2a y 5. 7-8. 9-10. 11)
R. Tú, Señor, eres el lote de mi heredad.

Protégeme, Dios mío, que me refugio en ti; yo digo al Señor: «Tú eres mi bien.»
El Señor es el lote de mi heredad y mi copa; mi suerte está en tu mano. R.

Bendeciré al Señor, que me aconseja, hasta de noche me instruye internamente.
Tengo siempre presente al Señor, con él a mi derecha no vacilaré. R.

Por eso se me alegra el corazón, se gozan mis entrañas, y mi carne descansa serena.
Porque no me entregarás a la muerte, ni dejarás a tu fiel conocer la corrupción. R.

Me enseñarás el sendero de la vida, me saciarás de gozo en tu presencia,
de alegría perpetua a tu derecha. R.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Gálatas (5, 1. 13-18)

Hermanos: Para vivir en libertad, Cristo nos ha liberado. Por tanto, manteneos firmes, y no os sometáis de nuevo al yugo de la esclavitud. Hermanos, vuestra vocación es la libertad: no una libertad para que se aproveche la carne; al contrario, sed esclavos unos de otros por amor. Porque toda la Ley se concentra en esta frase: «Amarás al prójimo como a ti mismo.» Pero, atención: que si os mordéis y devoráis unos a otros, terminaréis por destruiros mutuamente. Yo os lo digo: andad según el Espíritu y no realicéis los deseos de la carne; pues la carne desea contra el espíritu y el espíritu contra la carne. Hay entre ellos un antagonismo tal que no hacéis lo que quisierais. En cambio, si os guía el Espíritu, no estáis bajo el dominio de la Ley.

Lectura del santo evangelio según san Lucas (9, 51-62)

Cuando se iba cumpliendo el tiempo de ser llevado al cielo, Jesús tomó la decisión de ir a Jerusalén. Y envió mensajeros por delante. De camino, entraron en una aldea de Samaria para prepararle alojamiento. Pero no lo recibieron, porque se dirigía a Jerusalén. Al ver esto, Santiago y Juan, discípulos suyos, le preguntaron: - «Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?» Él se volvió y les regañó. Y se marcharon a otra aldea. Mientras iban de camino, le dijo uno: -«Te seguiré adonde vayas.» Jesús le respondió: - «Las zorras tienen madriguera, y los pájaros nido, pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.» A otro le dijo: -«Sígueme.» Él respondió: -«Déjame primero ir a enterrar a mi padre.» Le contestó: - «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el reino de Dios. » Otro le dijo: - «Te seguiré, Señor. Pero déjame primero despedirme de mi familia.» Jesús le contestó: -«El que echa mano al arado y sigue mirando atrás no vale para el reino de Dios.»

30 julio 2013. Domingo de la XIII semana de Tiempo Ordinario (Ciclo C) – Puntos de oración

No creo que sea necesario comentar las lecturas de este domingo, hablan a voces. Elías, san Pablo, Jesucristo  vidas que hablan de seguimiento, de coherencia, de valentía. La verdad es que dan un poco de miedo, pues cuando uno conoce de la madera de la que está hecho se siente tan lejos de estas figuras. Pero no está mal tener estos grandes modelos como referentes para nuestras vidas, al menos el deseo de ser como ellos.

Como nos dice san Pablo debemos dejarnos guiar por el Espíritu, de este modo puede que encontremos la fuerza necesaria para vivir un evangelio sin peros, para seguir a Jesús en este mundo donde en ocasiones hacerlo supone perder todo prestigio e incluso jugarse la vida.

La Virgen, discreta como siempre, no aparece en estas lecturas pero es la que permanece a nuestro lado. Gracias a Ella cuando caemos tenemos la mano que nos ayuda a levantarnos y empezar de nuevo.

29/6/2013, San Pedro y San Pablo, Apóstoles

Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles (12, 1-11)

En aquellos días, el rey Herodes se puso a perseguir a algunos miembros de la Iglesia. Hizo pasar a cuchillo a Santiago, hermano de Juan. Al ver que esto agradaba a los judíos, decidió detener a Pedro. Era la semana de Pascua. Mandó prenderlo y meterlo en la cárcel, encargando de su custodia a cuatro piquetes de cuatro soldados cada uno; tenla intención de presentarlo al pueblo pasadas las fiestas de Pascua, Mientras Pedro estaba en la cárcel bien custodiado, la Iglesia oraba insistentemente a Dios por él. La noche antes de que lo sacara Herodes, estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, atado con cadenas. Los centinelas hacían guardia a la puerta de la cárcel. De repente, se presentó el ángel del Señor, y se iluminó la celda. Tocó a Pedro en el hombro, lo despertó y le dijo: -«Date prisa, levántate.» Las cadenas se le cayeron de las manos, y el ángel añadió: -«Ponte el cinturón y las sandalias.» Obedeció, y el ángel le dijo: -«Échate el manto y sígueme.» Pedro salió detrás, creyendo que lo que hacía el ángel era una visión y no realidad. Atravesaron la primera y la segunda guardia, llegaron al portón de hierro que daba a la calle, y se abrió solo. Salieron, y a¡ final de la calle se marchó el ángel. Pedro recapacitó y dijo: -«Pues era verdad: el Señor ha enviado a su ángel para librarme de las manos de Herodes y de la expectación de los judíos.»

Salmo responsorial (Sal 33, 2-3. 4-5. 6-7. 8-9)
R. El Señor me libró de todas mis ansias.

Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor: que los humildes lo escuchen y se alegren. R.

Proclamad conmigo la grandeza del Señor, ensalcemos juntos su nombre.
Yo consulté al Señor, y me respondió, me libró de todas mis ansias. R.

Contempladlo, y quedaréis radiantes, vuestro rostro no se avergonzará.
Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha y lo salva de sus angustias. R.

El ángel del Señor acampa en torno a sus fieles y los protege.
Gustad y ved qué bueno es el Señor, dichoso el que se acoge a él. R.

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 4, 6-8. 17-18

Querido hermano: Yo estoy a punto de ser sacrificado, y el momento de mi partida es inminente. He combatido bien mi combate, he corrido hasta la meta, he mantenido la fe. Ahora me aguarda la corona merecida, con la que el Señor, juez justo, me premiará en aquel día; y no sólo a mí, sino a todos los que tienen amor a su venida. El Señor me ayudó y me dio fuerzas para anunciar íntegro el mensaje, de modo que lo oyeran todos los gentiles. Él me libró de la boca del león. El Señor seguirá librándome de todo mal, me salvará y me llevará a su reino del cielo. A él la gloria por los siglos de los siglos.

Lectura del santo evangelio según san Mateo (16, 13-19)

En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: -«¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?» Ellos contestaron: -«Unos que Juan Bautista, otros que Ellas, otros que Jeremías o uno de los profetas.» Él les preguntó: -«Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» Simón Pedro tomó la palabra y dijo: -«Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo.» Jesús le respondió: -«¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder del infierno no la derrotará. Te daré las llaves del reino de los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo.»

29 junio 2013. San Pedro y San Pablo, Apóstoles – Puntos de oración

Adentrarnos hoy en la oración es algo muy sencillo, pues vamos acompañados de estos dos gigantes del espíritu que vivieron en el amor, conocimiento y entrega a Jesucristo.

Les pedimos un corazón apasionado que se sepa enamorar de Cristo en este rato dedicado a la oración.

Son fundamento de lo que creemos y dieron la vida por el Evangelio, o sea, por Jesús. Por esto mismo se convierten para nosotros no solamente en testigos, sino también en maestros de vida interior.

Esta solemnidad de los Apóstoles ya se celebraba en el siglo IV en esta fecha del 29 de Junio, cuando se festejaba a San Pablo en la tumba de la vía Ostiense y a San Pedro en la catacumba de la vía Apia.

En los Hechos apócrifos de Pedro y Pablo, escritos en el siglo V bajo el influjo de León Magno, formados por la refundición revisada de los Hechos de Pedro, del siglo II, y de los hechos de Pablo, del siglo III, se demuestra la perfecta armonía de los dos apóstoles martirizados conjuntamente en Roma.

Según testimonio de Tertuliano, siglo II, Pedro de Betsaida murió crucificado; y, según Orígenes, con la cabeza hacia abajo. Las excavaciones recientes confirman que el martirio del jefe de los Apóstoles, hacia el año 67, se llevó a cabo en la colina del Vaticano.

Pablo de Tarso, en Cilicia, cuyo nombre era Saulo, fue decapitado hacia el año 67, como atestigua también Tertuliano y la tradición constante, junto a la vía Ostiense, a cinco kilómetros de Roma.

Ambos apóstoles han estado siempre unidos en la veneración cristiana, aunque no esté probado que permanecieran presos en la misma cárcel Mamertina.

En la oración colecta de la Misa se nos dan las claves para descubrir la importancia de esta veneración a Pedro y a Pablo: "Dios entregó a la Iglesia las primicias de su obra de salvación".

Por medio de los Apóstoles la Iglesia se ha mantenido siempre fiel a las enseñanzas  de aquellos que fueron fundamento de nuestra fe cristiana. Ellos nos han transmitido las claves fundamentales:

  • Perseverancia en la fracción del pan.
  • Fidelidad a las enseñanzas de los apóstoles
  • Fortalecimiento del vínculo de la caridad
  • Un solo corazón y una sola alma en la plegaria.

Pedro fue el primero en confesar la fe; Pablo el maestro insigne que la interpretó; aquél fundó la primera Iglesia con el resto de Israel; éste la extendió a todas las gentes.

Procuremos imitar su fe, su vida, sus trabajos, sus sufrimientos, su testimonio y su doctrina.

Mirando la vida y el testimonio de estos dos grandes maestros es como enfocamos la oración de este día. No podemos hacerlo de otra manera. Son modelo de cercanía con Jesús, aunque cada uno con su estilo peculiar, lo cual nos muestra que hemos de acercarnos al Maestro de la vida con nuestra propia personalidad.

Hacer oración junto a Pedro y a Pablo es encenderse en deseos de identificación. "Señor, ¿a quién iremos? Solo tú tienes palabras de vida eterna".

No puede faltar en este día una petición especial por el Papa Francisco, sucesor de Pedro, para que el Señor le ilumine y le llene de fortaleza para que sea un faro que ilumine este tramo de la historia que atraviesa la Iglesia.

Santa María, Reina de los Apóstoles, haznos a cada uno de nosotros verdaderos enamorados de Jesucristo, dispuestos a trabajar por el Reino de Dios, la propagación del Evangelio, hasta el último aliento de nuestra vida.

28/6/2013, Viernes de la XII semana de Tiempo Ordinario

Lectura del libro del Génesis (17, 1. 9-10. 15-22)

Cuando Abrán tenía noventa y nueve años, se le apareció el Señor y le dijo: -«Yo soy el Dios Saday. Camina en mi presencia con lealtad.» Dios añadió a Abrahán: -«Tú guarda mi pacto, que hago contigo y tus descendientes por generaciones. Éste es el pacto que hago con vosotros y con tus descendientes y que habéis de guardar: circuncidad a todos vuestros varones.» Dios dijo a Abrahán: -«Saray, tu mujer, ya no se llamará Saray, sino Sara. La bendeciré, y te dará un hijo, y lo bendeciré; de ella nacerán pueblos y reyes de naciones.» Abrahán cayó rostro en tierra y se dijo sonriendo: -«¿Un centenario va a tener un hijo, y Sara va a dar a luz a los noventa?» Y Abrahán dijo a Dios: -«Me contento con que te guardes vivo a Ismael.» Dios replicó: -«No; es Sara quien te va a dar un hijo, a quien llamarás Isaac; con él estableceré mi pacto y con sus descendientes, un pacto perpetuo. En cuanto a Ismael, escucho tu petición: lo bendeciré, lo haré fecundo, lo haré multiplicarse sin medida, engendrará doce príncipes y haré de él un pueblo numeroso. Pero mi pacto lo establezco con Isaac, el hijo que te dará Sara el año que viene por estas fechas.» Cuando Dios terminó de hablar con Abrahán, se retiró.

Salmo responsorial (Sal 127, 1-2. 3. 4-5)
R. Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor.

Dichoso el que teme al Señor y sigue sus caminos.
Comerás del fruto de tu trabajo, serás dichoso, te irá bien. R.

Tu mujer, como parra fecunda, en medio de tu casa;
tus hijos, como renuevos de olivo, alrededor de tu mesa. R.

Ésta es la bendición del hombre que teme al Señor.
Que el Señor te bendiga desde Sión, que veas la prosperidad de Jerusalén
todos los días de tu vida. R.

Lectura del santo evangelio según san Mateo (8, 1-4)

En aquel tiempo, al bajar Jesús del monte, lo siguió mucha gente. En esto, se le acercó un leproso, se arrodilló y le dijo: -«Señor, si quieres, puedes limpiarme.» Extendió la mano y lo tocó, diciendo: -Quiero, queda limpio.» Y en seguida quedó limpio de la lepra. Jesús le dijo: -«No se lo digas a nadie, pero, para que conste, ve a presentarte al sacerdote y entrega la ofrenda que mandó Moisés.»

28 junio 2013. Viernes de la XII semana de Tiempo Ordinario – Puntos de oración

Preparando muchos el campamento, donde viviremos  de forma especial la Campaña de la Visitación, nos acercamos a las lecturas  que nos presenta la liturgia de la Iglesia para este día, junto con el santo del día San  Ireneo de Lyon, un santo padre de la iglesia de los primeros siglos de la Iglesia donde ser cristiano equivalía a ser mártir, algo parecido a lo que sucede hoy serlo en un país musulmán donde la persecución es atroz pro tantos casos  como tenemos recientes. Tenemos que agradecerle que sea uno de los que contribuyó a que se mantuviera íntegro el Evangelio de  Cristo, como nos dice el P. Tomás Morales en su semblanza.

"Dios se hizo hombre, para que el hombre se hiciera Dios" es la síntesis de su enseñanza durante toda su vida, su empeño y entrega más completa a esta realidad del cristiano que por las aguas del bautismo entra a formar parte de la familia de Dios, hijo de Dios, ¡qué insondable verdad! Vivida  tenemos  resueltas todas nuestras dudas. No tenemos más que acudir al Padrenuestro, donde  tenemos esta hermosa herencia.

Haba de la Virgen  con el título de "Nueva Eva", que quizá se lo escuchó a San  Policarpo que era a su vez discípulo de san Juan como él mismo cuenta:  "Recuerdo cuando siendo niños, en el Asia Menor nos sentábamos junto a Policarpo… que parece nos acompaña siempre y se afianza al correr de los años.  Podría señalar el sitio en el que él se sentaba para enseñarnos,... recuerdo que nos contaba de su trato con Juan y los demás que vieron al Señor. Nos repetía que ellos contemplaron al Verbo de la Vida, sus milagros, oyeron sus palabras…"

Los santos son  nuestros mejores amigos y más si son mártires y nos enseñan a :

1º Ser testigos. Testigos creíbles como nos pregunta el papa Francisco: ¿Somos creíbles hoy? Si lo somos, arrastraremos a las almas a Dios como ellos.

2º Ejemplares en el cumplimiento de nuestras tareas, creativos, emprendedores o como se oye hoy, innovadores, ante una sociedad en crisis, tenemos la respuesta más eficaz: Cristo, el Verbo de la Vida que ha sabido darla por sus testigos en la Iglesia, los santos, quienes han  puesto luz en medio de tanta tiniebla. Escuchemos al papa Francisco, sigamos su ejemplo, aprendamos de sus gestos y su palabra acertada para  estos momentos.

3º Vivamos la Campaña de la Visitación, saliendo de nosotros mismos, como la Virgen, que, presurosa  reparte alegría por los caminos y a su prima Isabel y a su hijo, santifica, porque lleva Jesús en sus entrañas. De la misma forma, también nosotros con Cristo dentro, fortaleza  en la oración seamos sus seguidores en este verano que para muchos  será un invierno en sus corazones.

El Evangelio del día también nos pone en marcha, es el llamamiento de Mateo. Hoy como entonces, Jesús sigue llamando. Que no seamos sordos a su llamamiento. Nos llama a la oración, donde podemos encontrarlo, que no la dejemos ni un día, son los mejores encuentros de nuestra vida. Espera nuestra respuesta con paciencia. Tiene tanto respeto  a nuestra libertad,  que quiere  una respuesta del corazón que ama, libre, sincera y total.

 

Tras el periodo estival de vacaciones (julio-agosto) vuelve cada día este alimento espiritual con los PUNTOS DE ORACIÓN que preparan los Militantes de Santa María, día a día. Me da mucho gusto compartírtelos y si te animas puedes solicitarlos a oraciondelmilitante@gmail.com

http://www.oraciondelmilitante.blogspot.com/


02/09/2013, Lunes de la XXII semana de Tiempo Ordinario

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (4, 13-18)

Hermanos, no queremos que ignoréis la suerte de los difuntos para que no os aflijáis como los hombres sin esperanza. Pues si creemos que Jesús ha muerto y resucitado, del mismo modo, a los que han muerto, Dios, por medio de Jesús, los llevará con él. Esto es lo que os decimos como palabra del Señor: Nosotros, los que vivimos y quedamos para cuando venga el Señor, no aventajaremos a los difuntos. Pues él mismo, el Señor, cuando se dé la orden, a la voz del arcángel y al son de la trompeta divina, descenderá del cielo, y los muertos en Cristo resucitarán en primer lugar. Después nosotros, los que aún vivimos, seremos arrebatados con ellos en la nube, al encuentro del Señor, en el aire. Y así estaremos siempre con el Señor. Consolaos, pues, mutuamente con estas palabras.

Salmo responsorial (Sal 95, 1 y 3. 4-5. 11-12a. 12b-13)

R. El Señor llega a regir la tierra.

Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor, toda la tierra.

Contad a los pueblos su gloria, sus maravillas a todas las naciones. R.

Porque es grande el Señor, y muy digno de alabanza, más temible que todos los dioses. 

Pues los dioses de los gentiles son apariencia, mientras que el Señor ha hecho el cielo. R.

Alégrese el cielo, goce la tierra, retumbe el mar y cuanto lo llena;

vitoreen los campos y cuanto hay en ellos. R.

Aclamen los árboles del bosque, delante del Señor, que ya llega,

ya llega a regir la tierra: regirá el orbe con justicia y los pueblos con fidelidad. R.

Lectura del santo evangelio según san Lucas (4, 16-30)

En aquel tiempo, fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados, y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido. Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres, para anunciar a los cautivos la libertad, y a los ciegos la vista; para dar libertad a los oprimidos, para anunciar el año de gracia del Señor.» Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles: -«Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.»  Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios. Y decían: -«¿No es éste el hijo de José?» Y Jesús les dijo: -«Sin duda me recitaréis aquel refrán: "Médico, cúrate a ti mismo Y'; haz también aquí en tu tierra lo que hemos oído que has hecho en Cafarnaún.» Y añadió: -«Os aseguro que ningún profeta es bien mirado en su tierra. Os garantizo que en Israel habla muchas viudas en tiempos de Elías, cuando estuvo cerrado el cielo tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en todo el país; sin embargo, a ninguna de ellas fue enviado Elías, más que a una viuda de Sarepta, en el territorio de Sidón. Y muchos leprosos habla en Israel en tiempos de] profeta Elíseo; sin embargo, ninguno de ellos fue curado, más que Naamán, el sirio.» Al oír esto, todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo. Pero Jesús se abrió paso entre ellos y se alejaba.

 

Lunes de la XXII semana de Tiempo Ordinario – Puntos de oración

1.      Vamos a situarnos ante el evangelio de este día:

a.       Desde hoy lunes, hasta el final del Año Litúrgico, vamos a leer al evangelista S. Lucas. Como habéis visto, comenzamos por el capítulo cuarto, y esto es debido, a que  los tres primeros capítulos se reservan para el Adviento y la Navidad.

b.      No hay un acuerdo claro, sobre la pregunta, de por qué S. Lucas sitúa en su evangelio el relato del rechazo de Nazaret al principio de su narración del ministerio en Galilea, mientras que S. Mateo y S. Marcos lo ubican mucho más tarde.

                                                i.      Algunos han sugerido la posibilidad de dos rechazos en Nazaret, uno implícito y otro más explícito...

                                              ii.      Lo cierto es que es un reflejo de dos tendencias ante la persona de Jesucristo: Interés y asombro entusiasmado al principio..., y luego un claro rechazo...

2.      Pasemos a la lectura texto y comencemos nuestra oración:

a.       "En aquel tiempo, fue Jesús a Nazaret, donde se había criado, entró en la sinagoga, como era su costumbre los sábados..."

                                                i.      Jesús asiste a la sinagoga donde se encuentre..., y en particular en el día de reposo, pero solo aquí (Lc.4,16) se añade "era su costumbre".

                                              ii.      Si es cierto que Jesús, en cuanto a conocimiento y sabiduría, estaba muy por encima de cualquier otro que impartiera instrucción en la sinagoga, él no dejaba de asistir.

                                            iii.      El ejemplo de Jesús nos trae a la memoria pasajes tales como:

1.      Dt. 12,5: " sino que buscaréis el lugar que el Señor vuestro Dios eligiere de entre todas vuestras tribus para poner allí su nombre y morar en él, e iréis allí..."

2.      Sal. 84,1-4: ¡Qué deseables son tus moradas, | Señor del universo!  3 Mi alma se consume y anhela | los atrios del Señor, | mi corazón y mi carne | retozan por el Dios vivo. 4 Hasta el gorrión ha encontrado una casa; | la golondrina, un nido | donde colocar sus polluelos: | tus altares, Señor del universo, | Rey mío y Dios mío.

3.      Heb. 10,25: "no faltemos a las asambleas, como suelen hacer algunos, sino animémonos tanto más cuanto más cercano veis el Día."

3.      "y se puso en pie para hacer la lectura. Le entregaron el libro del profeta Isaías y, desenrollándolo, encontró el pasaje donde estaba escrito.."

a.       ¿Cuál era la secuencia de la liturgia en la sinagoga en tiempos de Jesús?

                                                i.      Las acciones de gracias o "bendiciones" pronunciadas en relación con el Shemá.

                                              ii.      La oración. La asamblea respondía "Amén" al unísono.

                                            iii.      Lectura de un pasaje del Pentateuco. Esta la hacían los rabinos...

                                             iv.      Lectura de un pasaje de los Profetas. Esta podían hacerla los laicos que hubieran cumplido los 30 años.

                                               v.      La palabra de exhortación.

                                             vi.      La bendición si había un sacerdote o la oración final si no lo había...

4.      «El Espíritu del Señor está sobre mí,

a.       porque él me ha ungido.

b.      Me ha enviado

                                                i.      para anunciar el Evangelio a los pobres,

                                              ii.      para anunciar a los cautivos la libertad,

                                            iii.      para dar  a los ciegos la vista;

                                             iv.      para dar libertad a los oprimidos,

                                               v.      para anunciar el año de gracia del Señor.»

5.      "Y, enrollando el libro, lo devolvió al que le ayudaba y se sentó. Toda la sinagoga tenía los ojos fijos en él. Y él se puso a decirles: -«Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír.»

a.       ¡Qué pasaje más interesante leyó Jesús! Y entonces sucede lo inesperado... Tratemos de imaginar la situación:

                                                i.      La atmósfera se sobrecarga de curiosidad...

                                              ii.      ¡Qué será lo que va a decir el carpintero...!

                                            iii.      ¡Todo está silencioso...!

                                             iv.      ¡Todos los ojos están fijos en Jesús…!

                                               v.      El abre su boca, y comienza su discurso...

b.      Y en lugar de recordad la edad de oro, que ya no volvería..., ni de entretener a sus oyentes con promesas óptimas en cuanto al futuro... En lugar de eso, él habla del aquí y ahora...!

                                                i.      El aseguro a su pueblo que la edad de oro realmente había llegado.

                                              ii.      "Hoy", dice, "en vuestros propios oídos, el pasaje que había leído, se estaba cumpliendo...

                                            iii.      Y lo cierto era que era verdad... ¿Acaso no estaban los ciegos recuperando su vista, los cojos caminando, los leprosos siendo sanados…? ¿No estaban siendo proclamadas las buenas nuevas a los pobres…? ¿Y quién era el Siervo del Señor a través del que se estaba cumpliendo todo esto...?

6.      Y entonces el auditorio reacciona:

a.       Con asombro...

                                                i.      "Y todos le expresaban su aprobación y se admiraban de las palabras de gracia que salían de sus labios..."

b.      Con dudas...

                                                i.      "Y decían: -«¿No es éste el hijo de José?»

c.       Con violencia...

                                                i.      "...todos en la sinagoga se pusieron furiosos y, levantándose, lo empujaron fuera del pueblo hasta un barranco del monte en donde se alzaba su pueblo, con intención de despeñarlo."

7.      Y nosotros... ¿Cómo reaccionamos hoy ante este evangelio que la Iglesia nos proclama..?

a.       "Hoy se cumple esta Escritura"

                                                i.      Es lo que pasa cada día en nuestra escucha de las lecturas biblias...

                                              ii.      No se nos proclaman para que nos enteremos de lo que pasó.., lo sabemos ya.., sino porque Dios quiere renovar su gracia salvadora, hoy, aquí y ahora con nosotros... Esto es lo que nuestra meditación debe buscar..., debe esperar..., debe anhelar... ¡Ábreme los ojos Señor..! ¡Líbrame..., Señor...! ¡Y contemplaré las maravillas de tu Voluntad...!



-- 
"¿A quién hemos de acudir, si sólo Tú tienes Palabras de Vida Eterna?"

http://www.oraciondelmilitante.blogspot.com/

0 comentarios:

Publicar un comentario

 

Copyright © Confederación de Institutos Seculares de America Latina Design by O Pregador | Blogger Theme by Blogger Template de luxo | Powered by Blogger