Beatificado el sacerdote de la obra de Schönstatt Gerhard Hirschfelder
El arzobispo de Colonia propone al mártir como modelo para los jóvenes
MUNICH, lunes 20 de septiembre de 2010 (ZENIT.org).- El sacerdote
martirizado durante el nazismo Gerhard Hirschfelder, perteneciente al
primer grupo de sacerdotes del movimiento de Schönstatt en el campo de
concentración de Dachau, fue beatificado este domingo en la catedral de
Munich.
El arzobispo de Colonia, el cardenal Joaquim Meisner, representó al Papa
en la ceremonia y definió al sacerdote, fallecido en el campo de
concentración de Dachau a los 35 años, como un modelo para los jóvenes,
informó Radio Vaticano.
Peregrinos de toda Alemania y también de Polonia y de la República Checa,
donde el recuerdo del sacerdote está muy vivo, peregrinaron hasta la ciudad
alemana para asistir a la beatificación.
El padre Gerhard Hirschfelder fue proclamado beato como "mártir y testigo
de la fe". El cardenal Meisner destacó que el sacerdote rechazó la inhumana
lógica nazi y recordó su especial compromiso en la pastoral juvenil.
El acto del domingo estuvo precedido por una eucaristía vespertina en la
iglesia de Überwasser, el sábado por la tarde, seguida de una procesión con
candelas hasta la catedral y una hora de oración silenciosa.
Por los jóvenes
El nuevo beato nació el 17 de febrero de 1907 en el condado de Glatz, en
Silesia. Estudió en el Liceo humanístico de Glatz, y aprobó allí su examen
de bachiller en 1926.
Según la biografía P. Gerhard Hirschfelder, un mártir del condado de
Glatz, fallecido el 1º de agosto de 1942 en el campo de concentración de
Dachau, editada por monseñor Franz Jung, visitador canónico para los
sacerdotes y fieles del condado de Glatz, fue ordenado sacerdote en 1932.
Por ser hijo natural, su camino al sacerdocio estuvo lleno de
dificultades, ya que el antiguo código de derecho canónico no lo permitía.
Necesitó una autorización especial para estudiar Teología y una dispensa
para las órdenes mayores, que recibió con retraso, por lo que no pudo ser
ordenado junto con sus compañeros de curso.
Desde 1932 hasta 1939 fue capellán en Grenzeck (Tscherbeney), y desde ese
año hasta el 1 de agosto de 1941 fue capellán mayor en Habelschwerdt y
responsable de la pastoral juvenil de la diócesis.
El joven sacerdote constató la naturaleza y los efectos de la propaganda
nazi e intentó mantener lejos de ésta a sus jóvenes, a través de su
cercanía y de la dirección espiritual.
En sus homilías, denunció con valentía los excesos y la violencia de aquel
periodo. La Gestapo reaccionó a todo ello arrestándole en 1941, durante una
reunión con jóvenes.
Durante los más de cuatro meses que permaneció en la cárcel en Glatz,
escribió un impresionante Vía crucis y algunas reflexiones sobre el
sacerdocio, el matrimonio y la familia.
Fue trasladado al campo de concentración de Dachau el 15 de diciembre de
1941 y falleció por hambre y por una grave neumonía el 1 de agosto de 1942.
Sus cenizas están enterradas en la ciudad polaca de Czermna (Tscherbeney),
en la Baja Silesia, donde el padre Hirschfelder había trabajado como
capellán.
"Constructor de puentes"
El padre Hirschfelder "daba una impresión sumamente humilde, casi tímida,
practicó una noble discreción y a la vez estaba siempre dispuesto a hacer
un favor a los demás", recuerda un sacerdote que vivió con él en el bloque
26/3 del campo de concentración, el padre Engelbert Rehling, OMI.
"Lo conocí un poco más de cerca por medio del padre Fischer; me puso en
contacto con él y así conversamos sobre Schoenstatt; el padre Hirschfelder
se interesó por la comunidad y conoció y amó a la Madre tres veces
Admirable", explica, en un testimonio recogido en la página web del
movimiento de Schönstatt.
El nuevo beato perteneció al primer grupo de sacerdotes de Schoenstatt en
el campo de concentración de Dachau, junto al beato Carlos Leisner, al
sacerdote palotino Ricardo Henkes y al párroco alemán Alois Andritzki,
ambos en proceso de beatificación.
La promulgación del decreto sobre el martirio del sacerdote fue autorizada
el pasado 27 de marzo por Benedicto XVI.
Su causa de beatificación se abrió en la catedral de Munich en 1998. En
abril de 2002 fue entregada en Munich la Positio terminada.
Además de toda la documentación, se reunieron -en Alemania, Polonia y la
República Checa- más de diez mil firmas pidiendo su beatificación.
Ante esta cifra, el prelado decano de Glatz, monseñor Franz Jung, dijo que
el beato puede ser "un constructor de puentes para una Europa unida".
Mártires durante el nazismo
A la beatificación de Gerhard Hirschfelder seguirán ceremonias análogas
durante el próximo año para otras figuras significativas de sacerdotes
mártires del régimen nazi: Georg Häfner, en Wurzburgo; y Johannes Prassek,
Hermann Lange y Eduard Müller, en Lubeca.
Con los sacerdotes de Lubeca se rendirá homenaje también al pastor
evangélico Karl Friedrich Stellbrink, como explicó el Papa en el discurso
que dirigió al nuevo embajador alemán el pasado 13 de septiembre en Castel
Gandolfo.
Benedicto XVI se refirió a estos testimonios como "indicaciones luminosas"
para el camino ecuménico.
"Son hombres que enseñan a dar la propia vida por la fe, por el derecho a
ejercer libremente su propio credo y por la libertad de palabra, por la paz
y la dignidad humana", dijo.
"La probada amistad de los cuatro eclesiásticos -afirmó el Papa- es un
testimonio impresionante del ecumenismo de la oración y del sufrimiento,
que floreció en varios lugares durante el oscuro periodo del terror nazi".
Browse » Home
martes, 21 de septiembre de 2010
Gerhard Hirschfelder, joven sacerdote de Schönstatt, nuevo beato
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario