¿Cómo te les colaste? fue la pregunta que me hiciera el Exmo. Sr. José Ma. de la Torre, obispo de la Diócesis de Aguascalientes y originario de este Municipio cuando me vio en el 2009 en campaña política acompañando al candidato a la Presidencia Municipal. Va la historia de la colada:
A uno de mis hermanos, que había estado laborando por casi 50 años en el magisterio le pidieron que se lanzara de candidato a Presidente Municipal, logrando el triunfo en las elecciones de julio de 2006 por voluntad de los ciudadanos. Iniciaría su administración en enero de 2007.
Pero la voluntad de Dios fue otra, lo había elegido para el apostolado del dolor. En octubre le detectaron un tumor canceroso en el pulmón, con metástasis en la columna vertebral.
Como no había normatividad legal, ¿cómo actuar en esos casos? ¿debía renunciar a un cargo, al que no había tomado posición? ¿debería rendir protesta al cargo, nombrar sus funcionarios y luego renunciar?, no se sabía. El 31 de diciembre se tuvo la toma de protesta con todos los regidores, afuera, en la calle, frente a la casa del Presidente electo, que no se podía mover y que se le dificultaba el habla. El día 1 de enero, primera sesión de Ayuntamiento, nombramientos de funcionarios, sorpresa para muchos que esperaban su renuncia; se facultó como recinto oficial la casa del Presidente Municipal.
La casa que quedó como recinto oficial mide como 65 Mt. cuadrados, sólo tiene una recámara en la planta baja que servía de oficina-dormitorio, en la sala comedor celebraban las reuniones de Ayuntamiento, con asistencia además del Presidente Municipal, 16 Regidores, la Prensa, los ciudadanos que interesaban en presenciar la reunión de Ayuntamiento. Otras veces, cuando al Presidente no lo podían levantar, las reuniones se celebraban en la oficina-dormitorio, quedando unos fuera del recinto oficial. No se a quien admirar más si al Presidente, que con carga de horario de trabajo de hasta 14 horas continuas, sólo con algunos espacios para aseo personal y tomar alimentos o la paciencia de la ciudadanía.
Por las noches mi hermana, su esposo y sus dos hijos acudían a ayudarnos, hacer cambios de ropa, y mientras rezábamos el Rosario, sentarlo para su descanso.
Una vez instalado el recinto oficial, por conducto de uno de los Regidores me manda preguntar mi hermano que si voy aceptar el cargo de presidenta del DIF (Desarrollo Integral de la Familia), cargo honorífico que se les otorga a las esposas de los presidentes municipales. Como mi hermano era soltero, me pasan “el carguito”.
Me defiendo “como gato boca arriba”, aduciendo mi situación; que ellos son los políticos, por qué quieren repartir trabajo; que debo estar al pendiente del hermano, que no hay nadie más en casa, que debo acompañarlo al hospital, etc. etc. El Regidor sólo dice, acepta para que nos evites problemas, la Directora se encarga de todo, las reuniones del Patronato se harán aquí.
El Sistema DIF Municipal, es un órgano descentralizado, con patrimonio propio y subsidio del Gobierno Municipal.
La víspera de la toma de protesta, no pude dormir, me asusté más que cuando me dieron la noticia de que mi hermano tenía cáncer y mucho más cuando tuve que desplazarme a la ciudad de Guadalajara a temprana hora para poder llegar a registrar firmas. ¿Cómo hacerle para estar en dos partes al mismo tiempo? Hay que agregar que nunca había trabajado en asistencia social, sólo en el área administrativa y mi preparación académica es media superior. Cuando me preguntó un periodista sobre mi plan de trabajo, le respondí: buscar la puerta para entrar, ya que ni siquiera conocía el edificio donde se ubica el DIF. Así entre temores y sustos se llegó la fecha 25 de agosto, término del paso terrenal de mi hermano hacia la Patria Celestial.
Ya había terminado mi trabajo, sólo Dios sabe si bien o mal.
Como consecuencia del fallecimiento de mi hermano, necesidad de estar al pendiente de otras actividades que él tenía: agricultura y ganadería. Como agricultora la única experiencia que tenía, a los 13 años me fui de sembradora con un tío, pero ¿cuándo hay que sembrar? ¿qué hay que sembrar? Y ¿quién va a sembrar? No lo sabía. Como ganadera, en mi infancia había tenido un gato, mi hermano tenía cerdos, pero yo les tenía miedo, él tenía gallinas y palomos, yo no me animaba a inyectarlos cuando era necesario. Al presentarme ante la Secretaría de Agricultura y Ganadería para mi registro, vienen las preguntas, ¿qué come el ganado? ¿qué raza es? ¿qué tipo de pastizal? Fácil la respuesta: de que están comiendo, están comiendo no se han muerto, pónganle lo que se les antoje yo sólo distingo el toro de la vaca y todos están negritos.
Nombran al Presidente Sustituto y antes de darlo a conocer a la prensa me manda preguntar si voy a seguir ayudándoles. Nuevamente titubeo, más sustos y temores, “me vuelvo encampanar”
Habían pasado dos años, parecía que iba “instalando mi tiendita”, sólo faltaba un año para el término de ese compromiso, cuando nuevamente surge: la invitación de otro candidato para la siguiente contienda electoral, me invita a participar en su planilla, la respuesta fue: “bola de mentirosos”, aunque en realidad la Directora lo hacía todo, pero por un lado sentía que “no es lugar de mi andar ni de mi detenerme” palabras del Santo Juan Diego. Porque en realidad “soy mecapal, soy parihuela, soy cola, soy ala; yo mismo necesito ser conducido, llevado a cuestas” y por otro lado sentía la necesidad de “estar vigilante para captar los signos de los tiempos y descubrir en ellos la acción del Espíritu Santo que actúa en medio de los hombres”. Acepto, no sin antes pensar que no es signo de madurez echarse compromisos, sabiendo de ante mano dificultad para realizarlos.
Al término de la elección, no salió electo el candidato que me invitó y quedamos minoría del mismo Partido como Regidores en el Ayuntamiento. Nuevamente sustos y temores. A la hora del reparto de comisiones: Como vocal, Turismo y Ciudades Hermanas, Vialidad, Tránsito y Nomenclatura; Parques y Jardines; Asistencia Social; Medio Ambiente y para presidir Alumbrado Público. Segurísima: “no es lugar de mi andar ni de mi detenerme”.
Aquí está la respuesta al Sr. Obispo, ¿Cómo me les colé? No lo se, pero aquí estoy de colada.
Mi vida ha dado un giro de 180º, sigo imitando al glorioso Juan Diego, “como peregrina, siguiendo el paso del camino del mundo y de la Iglesia.” Tratando de llevar a cabo la petición de María: “Mucho quiero, mucho deseo que aquí me levanten mi casita sagrada, en donde Lo mostraré, Lo ensalzaré al ponerlo de manifiesto: Lo daré a las gentes en todo mi Amor Personal, en mi mirada compasiva, en mi auxilio, en mi salvación”
Arcelia Alcalá Cortés.
“Mensajera de las Rosas”
Es realmente admirable, la felicito por sus dobles compromisos, con su vida al servicio de las cosas de Dios, y al servicio de la humanidad.
ResponderEliminarY que descanse en paz, tan honorable Sr. Raúl Alcalá Cortés.